TU ÁRBOL GENEALÓGICO… Y TÚ
(PRIMERA PARTE)
En esta ocasión tocaré un tema muy sensible para ciertas personas, porque
hablaré acerca de su familia directa, así que quiero ofrecer disculpas
anticipadas por si alguien se ofende con mis palabras…
Sépanlo que no quise tocarles un pelo siquiera y todo lo aquí escrito ha sido
con la mejor de las intenciones para poder ayudarles de alguna forma con su
vida. Gracias.
Sin más preámbulos, vayamos, ¡al grano! entonces: ¿Alguna vez te interesaste
por saber siquiera cuál fue el oficio u ocupación de tus abuelos y el de los
padres de éstos?
¿Tienes la certeza de saber de qué forma se ganaban la vida esos señores de
antaño?
¿Recuerdas por lo menos el nombre de tus bisabuelos? Porque normalmente quienes
siguen admirando y agradeciendo a esos entrañables personajes, festejándoles su
aniversario luctuoso por lo menos, es porque les heredaron magníficas fortunas,
si no, ni siquiera guarda uno memoria de esos vetustos «cabecitas de algodón».
¿Te habías puesto a pensar en eso?
¿Habrán sido esos sujetos simples peones de alguna hacienda allá por el siglo
XVIII o XIX? O serían acaso los mismísimos terratenientes y el meritito “mandamás”
de la comarca donde vivían…
¿Qué tipo de ajuar o vestimenta portaban? ¿Acaso vistieron calzón de manta y
andaban de huaraches de cuero todos los santos días? O portaron elegantes
trajes y pelucas a la moda emulando a los antiguos reyes y usaron zapatos y
perfumes finos traídos de las Europas. ¿Cuál de las dos cosas sería?
¿Fueron pudientes y adinerados tus viejos? O fueron unos fulanos desarrapados,
andrajosos, zarrapastrosos y pobres diablillos del montón…
¿Sabes si les pagaban un raquítico sueldo a través de las codiciosas tiendas de
raya? O quizás eran dueños de prósperos y lucrativos negocios. ¿Cómo lo podrías
tú saber?
¿Habrían amasado cuantiosas fortunas? O sólo tuvieron en sus manos unas
miserables monedas para irla pasando hasta que llegó la inexorable hora de su muerte.
¿Sabes qué tan buena o mala fue la relación que sostuvieron tus antepasados con
la sociedad donde vivían?
¿Considerarían éstos la salud y la riqueza como una bendición, o como una
maldición?
¿Acaso eran extremadamente avariciosos? O se portaron demasiado espléndidos,
desapegados y bastante compartidos con los que los rodeaban.
¿Sabes si practicaron la filantropía? O nunca conocieron siquiera la palabra “altruismo”.
¿Sabes si fueron gente buena o gente mala que haya tenido dificultades con la
familia o con los demás?
Dime, entonces, QUIÉNES FUERON TUS ANTEPASADOS; háblame, aunque sea un poco
acerca de ellos, por favor…
¿Serían acaso ricos prestamistas, banqueros, mineros, constructores, médicos,
escritores, abogados, comerciantes, barberos, mayordomos, ganaderos,
terratenientes, pistoleros, asaltantes, abigeos, cirqueros, mujeres de la vida
galante, tratantes de blancas, pastorcillos, sirvientes, se dedicaron al
cultivo y venta de estupefacientes, fueron políticos buenos, o políticos malos,
brujos, depravados sexuales, acosadores, pederastas, jueces de la ley,
policías, sanadores, diputados, senadores, presidentes municipales,
gobernadores, presidentes de tu país, simples parias, o qué?
¿Conservarán en la familia fotografías de aquellos tiempos para que lo puedas
corroborar?
Investiga para que descubras la verdad en torno a este fascinante tema; SÁCATE
LA ESPINITA para que no te quedes con la duda…
¿Habrán recibido trato justo en los trabajos donde se desempeñaron tus
antecesores? O sufrieron vejaciones, maltrato y explotación por parte de sus
malos patrones.
Ya que todo eso, aunque parezcan sólo cosas del pasado, afectó para bien o para
mal a esos personajes en el campo de la psicología, el dinero, la riqueza y el
trato con los demás. Porque, ¿qué crees que pasó después?
Pues como consecuencia -por supuesto-, ese tipo de cultura y enseñanza FUE LO QUE HEREDASTE, porque sigue
corriendo por tus venas la sangre de quienes te precedieron con todo y sus
defectos y sus virtudes.
¿Entiendes a lo que quiero llegar? Si no, aquí te lo explico: Quiero que
hagamos primero una reseña de tu pasado para luego mostrarte la manera de
romper con lo establecido y así poder cambiarlo…
Porque te enseñaré a dar formato o reseteo a la información del “disco duro”
donde conservas las memorias que tienen que ver con todo lo negativo de tu
pasado para que puedas VOLVER A EMPEZAR… ¿estarías dispuesto?
ESTA HISTORIA CONTINUARÁ…
Martín Peña
Maestro de bioquantum
Talleres y cursos de autoconocimiento
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