miércoles, 18 de noviembre de 2015

El universo te dará lo que estés pensando


EL UNIVERSO TE DARÁ LO QUE ESTÉS PENSANDO

Debes tener claro que el éxito no es un golpe de suerte. El éxito lo lograrás gracias a las decisiones correctas que tomes.

Una buena decisión es un factor determinante para conquistar pronto y bien la victoria. Las decisiones son el combustible o la energía que necesitas para poder llegar a cumplir todas tus metas.

Cada día debes buscar la emoción de lo que puede ocurrir en el campo de las posibilidades. Si de repente te sientes un poco inseguro, no te preocupes por eso, estás en el camino correcto, tú sigue avanzando, no te des por vencido. Es normal que eso suceda, porque forma parte del entrenamiento que estás recibiendo de la vida.

Pero entiende que cuando te apegas demasiado a algo, congelas tu propio deseo, lo alejas de la fluidez y la flexibilidad infinitas y lo encierras dentro de un rígido marco que obstaculiza el proceso total de su creación.

La lección que debes aprender en este momento es que tienes que desapegarte de ideas absurdas que te lastimen y debiliten. Recuerda el dicho que dice: “Dime qué piensas y te diré quién eres”. Aplica eso en tu vida.

La ley del desapego acelera el proceso total de la evolución. Cuando entiendas esa ley ya no te sentirás obligado a forzar la solución de ningún problema en lo absoluto, porque si te empeñas en forzar la solución, con esa actitud sólo empeorarás la circunstancia misma y terminarás creando un problema nuevo.

El universo te dará lo que estés pensando, sea bueno o sea malo. Al universo no le importa si te va a beneficiar o te va a destruir la existencia. El universo no se piensa un instante para entregarte lo que pides.

El universo está diseñado como una máquina perfecta que cumple todos tus deseos. Pero si también le temes a algo, el universo lo tomará como un deseo y te lo dará a manos llenas.

Tienes que saber con exactitud lo que piensas y deseas porque el universo es como el genio de la lámpara maravillosa que cumple lo que deseas pero este no involucra sus sentimientos ni se pregunta para qué lo quieres, simplemente te lo da.

MARTÍN PEÑA


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